Carabela // 27/10/2013 //Jose María Falgas – Lo que a priori parecía bastante complicado para que se disputase la primera prueba, de las nueve, que forman el XX Trofeo Carabela de Plata 2013-2014 por la escasez de viento para la competición poco a poco subió y pudo celebrarse al alcanzar este una intensidad de ocho nudos. El Gran Premio Ayuntamiento de Los Alcázares está en disputa en las tres primeras regatas del calendario establecido por la organización del Club Náutico Mar Menor y que corresponden a las pruebas del 26 de octubre, 9 y 30 de noviembre. De los treinta y ocho barcos de las clases crucero y monotipos J-80 que figuran inscritos no tomaron la salida todos, ya que se pueden hacer descartes y algunos optaron por no entrar de momento en la competición.
Los jueces del Comité decidieron pasada la una del mediodía comenzar con el proceso de inicio de la regata con las señales de banderas correspondiente para ello. Este hecho despejó la incertidumbre de los regatistas al observar que en breve comenzaría la competición. Los primeros en entrar en acción fueron los de la clase RI2 y Promoción, a continuación lo hicieron los RI3 y RI4. Un flojo viento de levante creció para colocar ya la baliza de desmarque y poner rumbo los cruceros dirección a la isla Perdiguera. La tomaron por babor y a continuación la segunda a la altura de La Manga igualmente por babor. Una vez hecho el giro correspondiente y enarbolados los spinnaker la flota dirigió sus popas hacia el bollarín de llegada, situado frente al puerto deportivo de Los Alcázares, navegando ahora con viento del Este conocido en esta zona como jaloque. El primero en llegar fue el Malicia, de Pedro Pasquín, seguido por el Zante, de Francisco Sánchez del Campo, a escasos segundos y el Olimpia, de Rafael de la Hoz, a menos de dos minutos en RI2. Se dio la circunstancia que el barco Enewtec, ganador en esta clase en la anterior edición del Trofeo Carabela sufrió un fuera de línea y por lo tanto se quedó sin puntuar en esta prueba. En clase RI3, las diferencias entre los barcos fue mas notable en cuanto a los tiempos de entrada, pues lo hicieron con varios minutos de diferencia en lugar de segundos. Atila Uno, de Francisco Guijarro está al frente de esta clasificación seguido por el Alcotán Mil, de Tomás López y el Náyade, de Juan Antonio Olmo. Y en la clase RI4 ya comienza a afianzarse en el primer puesto el barco Eco, patroneado por Miguel Ángel Castilla, que es su deseo de intentar revalidar el gran triunfo obtenido en la edición 2013 al llevarse la Carabela de Plata e inscribir su nombre en el palmarés de este gran trofeo de vela. Eso sí, detrás tiene al Albana II, de Salvador García y el Saltón, de Víctor Guillamón, que no se lo van a poner nada fácil al Eco.
Por su parte los monotipos J-80 entraron en competición enseguida ya que el recorrido era más corto que el de los cruceros y además tenían que disputar dos mangas. Aquí se produjo un fuera de línea por parte del barco Defcom, dándose la circunstancia que fue quien cruzó primero la llegada cuando en realidad estaba descalificado. Pero la gran lucha por liderar la clasificación general estuvo centrada entre el barco Golosinas Fini, de Julio Bernardeau y el Deltastone, de Carlos Martínez, estando ambos al término de esta primera jornada empatados a tres puntos. Le sigue el Gonmo, de Emilio Azofra, que ocupó en ambas mangas el tercer puesto.
La segunda prueba de este XX Trofeo Carabela de Plata está prevista para el próximo 9 de noviembre.
